El proceso de registro en el padrón de importadores se ha simplificado mucho, pero comercializar exitosamente productos importados es otra historia. Hay algunas cosas que te recomendamos saber antes de importar a México.

  • Investiga los requisitos para registrarte como importador: En el caso de México, encontrarás todos los reglamentos e indicaciones en la página http://www.sat.gob.mx/. Es indispensable que tu negocio esté formalmente establecido y al corriente en sus obligaciones fiscales.
  • Infórmate sobre los documentos que requerirás para cada importación: Si te hacen falta documentos, tu envío puede retrasarse y esto podría significar perder tiempo, dinero e incluso la venta. Asegura también que tu producto cumple con las normas de etiquetado para ingresar al país.
  • Busca mecanismos de pago confiables, especialmente si no conoces bien a tu proveedor. La mayoría de los bancos pueden fungir como intermediarios para asegurar una transacción segura: tu proveedor embarca la mercancía cuando confirma que has depositado el dinero en una institución bancaria, pero no lo recibe sino hasta que demuestra que se han cubierto los términos acordados, así ambas partes quedan protegidas.
  • Si vas a importar artículos “brandeados”, es decir, que ya tienen impresos o incluidos logotipos de alguna marca registrada, deberás solicitar al dueño de la marca una carta con la autorización para ingresar esa mercancía al país, especificando si la autorización será exclusiva para importar la mercancía y venderla al propio dueño de la marca, o si tienes facultades para comercializarlos al público en general. No contar con esta carta podría implicar que tus productos se queden retenidos en la aduana sin responsabilidad para tu proveedor, es decir, tu tendrías que cubrir el pago al proveedor pero no podrías comercializar la mercancía y además incurrirías en costos adicionales de almacenamiento en un recinto fiscal mientras tu inversión está completamente detenida. Esto puede llevar a la quiebra a un importador pequeño especialmente cuando el volumen de mercancía es sustancial.
  • importaciones_picCalcula bien los impuestos antes de comprar: Para poder sacar tu mercancía de la aduana debes, por supuesto, cubrir todos los impuestos y derechos de importación correspondientes: Impuesto General de Importación (IGI), IVA, Derecho de Trámite Aduanero (DTA), etc.
  • Recuerda que la base gravable sobre la que se calcula el IVA incluye no solamente el valor de la mercancía (el que viene en la factura de tu proveedor), sino todos los incrementables como los fletes, el IGI (que puede variar dependiendo del tipo de producto y del país de origen –los tratados de libre comercio pueden disminuir o eliminar este porcentaje-) y el DTA. Además, si la factura está en moneda extranjera, deberás prever el tipo de cambio al momento del ingreso al país, porque el valor aduana en pesos estará condicionado a este tipo de cambio. Si calculas mal estos impuestos, te hará falta flujo de efectivo para poder liberar la totalidad de tus productos de la aduana y esos días adicionales te costarán tiempo y dinero.
  • Adicionalmente, considera que puedes encontrar productos que aparentemente tienen un precio excelente pero están sujetos a cuotas compensatorias para proteger a las industrias nacionales de la práctica del dumping, por ejemplo, en el caso de México los zapatos, artículos de acero y otros suelen tener estos impuestos adicionales.
  • Optimiza tus costos y calcula varios escenarios: Comprar un alto volumen de productos y/o con mucha anticipación te permitirá ahorrar montos importantes en fletes internacionales y obtener descuentos por volumen, pero puede repercutir en costos de almacenamiento; comprar con los tiempos de entrega justos te evitará eso, pero aumenta el riesgo de no cumplir con los términos acordados con tu cliente (recuerda que el SAT realiza revisiones al azar de los embarques y esto puede retrasar la liberación de tu mercancía en una semana o más).
  • Confirma con tu proveedor qué opciones de compra internacionales puede manejar (incoterms), por ejemplo, si el exportador se hace cargo del transporte desde su bodega y hasta el puerto de embarque convenido (FOB), o si la responsabilidad y los costos corren por tu cuenta, etc. Existen varios incoterms que debes conocer antes de solicitar a tu proveedor la cotización de los artículos y que impactarán en tus costos finales.
  • Asegura que si producto requiere certificaciones de origen, tu proveedor cuente con ellas, por ejemplo, si importas artículos de madera y estos no vienen barnizados, requerirás un certificado para introducirlas al país ya que podrían contener plagas nocivas. Estas variantes, aparentemente sin mucha importancia, pueden impedir definitivamente el ingreso de la mercancía a México y que pierdas toda tu inversión.
  • Por último, asesórate con tu agente aduanal para confirmar en qué fracción arancelaria cae tu producto (porque de ello dependerá el impuesto a pagar) y si requieres certificaciones específicas. Pídele que te mantenga actualizado de los cambios en materia aduanal para disminuir tus riesgos y mantener una buena utilidad en tu negocio.

 

Fuentes: Diario Oficial de la Federación http://www.dof.gob.mx

http://www.diariodelexportador.com/2016